La tecnología, la base de nuestra sociedad

La sociedad ha experimentado una gran informatización. Los ordenadores están en todas partes y todo funciona mediante ellos (las farmacias, la sala de consulta del médico, en colegios y universidades es imprescindible, ayuntamientos, policía, empresas, bancos, cajas de ahorro...) Si en el siglo XVIII se produjo la primera revolución industrial, el siglo XX ha sido el epicentro de la informatización de la sociedad.

El antecedente de los ordenadores fue la máquina de escribir, en 1714 se crea la primera en Inglaterra y su uso se generaliza a partir de 1850. Pero también las calculadoras tuvieron su importancia, no menos grande, en lo que a informatización se refiere. Y es que los primeros ordenadores se dedicaban exclusivamente a efectuar ejercicios de cálculo.

Sin embargo, mucho han evolucionado esos ordenadores, que ocupaban una habitación entera, hasta convertirse en un aparato de uso generalizado en todos los ámbitos de la sociedad y por personas de todas las edades. Por ejemplo, hoy día ya contamos con teléfonos móviles que permiten hacer videoconferencias, entre otras muchas cualidades, así como con ordenadores portátiles capaces de tener conexión a Internet, etc.

Los antiguos ábacos y calculadoras han sido sustituidos por programas informáticos capaces de gestionar la economía de empresas, bancos... Incluso los móviles “de última generación” sirven para acceder al correo (de la Red), navegar por Internet, así mismo hay programas que unen el teléfono móvil con el ordenador del trabajo de manera que se puede acceder desde el teléfono a los programas económicos de la empresa.

Por si todavía queda alguna duda de que la sociedad está informatizada una de las últimas novedades es la creación de unos pantalones vaqueros con un bolsillo especial para el iPod.

28 de febrero de 2006